Un lugar de primera categoría, con un sorprendente surtido de líneas increíbles en una enorme cueva y sus muros colindantes.

La pared de la derecha es más asequible, con algunos sextos, mientras que la de la izquierda es impresionante por su desplome y la selección de vías muy duras; en ambos casos, la mayoría discurren sobre chorreras y son bastante largas. El acceso es muy empinado, pero vale la pena para quienes quieran disfrutar escalando vías excepcionales a partir del séptimo grado.

La roca en el interior de la cueva es blanca, con poca adherencia, pero la pared de la derecha es calcáreo gris y naranja, muy adherente. Puede decirse que ofrece la más impresionante concentración de chorreras del valle, con muchas posibilidades de apertura todavía.

En invierno el río puede ir demasiado crecido para cruzarlo, lo cual impide el acceso. Bien equipado con parabolts y reuniones.
Resumen de las vias:
V+ – 6c+ = 4
7a – 7c+ = 18
8a – 8c+ = 18
Niños: El acceso no es muy adecuado para niños, con muchas cuerdas fijas sobre roca muy empinada.

Época: Por su orientación sureste se puede escalar todo el año, con sombra a partir de las 14:00 en la pared de la derecha y mucho antes en la cueva. El problema es que las chorreras filtran en invierno y primavera.
Es mejor desde finales de primavera a principios de invierno. En verano puede correr un poco de aire por la tarde. En invierno y en primavera, si llueve mucho, el río a menudo va demasiado crecido para cruzarlo; ante la duda, mejor no intentarlo.